Entre 1787 y 1806 se publicaron las Œuvres complètes de Marmotel realizadas bajo su supervisión. De los 32 volúmenes que las componen, seis lo constituyen sus Éléments de Littérature, aunque el título con el que aparecieron fue Élémens. En la «Advertencia» cuenta el autor que había recibido numerosas propuestas para la publicación independiente de los numerosos artículos sobre literatura que redactó para los volúmes dedicados a tal materia en la Encyclopédie Méthodique, entre 1735 y 1756, pero que no se había decidido hasta entonces. En los artículos ahora publicados incluye algunos de los comentarios que publicó en la Poétique françoise de 1763 y en el Suplément de l'Encyclopedie (1767-1777).
Para Marmontel, enciclopedista al fin y al cabo, los Éléments constituyen una obra pedagógica, de instrucción general, en la que aclara los conceptos principales de Retórica y Poética. Así pues, concibe este tratado como un manual ordenado alfabéticamente, disposición que considera la más adecuada en términos metodológicos. Lo explica del siguiente modo:
En una obra que halla su valor de la progresión y la interrelación de las ideas, el orden metódico de un libro es indispensable, lo sé bien, pero en un libro elemental, donde cada artículo lleva consigo el desarrollo, el complemento de su idea y donde se trata de definir más que de razonar, me parece que ese método no era tan necesario y que sería suficiente que la correlacción de los artículos fuera indicada mediante referencias (p. i-ij).
Además, asegura que la ventaja de tal procedimiento le permite ofrecer una larga serie de preceptos que extrae de diversas fuentes tanto antiguas como modernas y sobre los que establece multitud de relaciones. Marmontel está pensando en el lector al que dirige su tratado que, por un lado, es la juventud y, por otra, aquellos interesados que carecen del tiempo necesario para realizar largas lecturas. Así pues, como obra de consulta, debe huir de la pesadez y de la monotonía para resultar entretenida a sus lectores. Asimismo, dice haber tenido que evitar el método analítico porque su intención es ofrecer de un vistazo y reunidos los asuntos que forman ese cuerpo elemental de ideas teóricas. Por ello se excusa ante el posible público entendido, reconociendo el propósito didáctico que persigue y, en esa misma línea, señala que ha incluido nuevas voces, que en la Encyclopédie redactaron otros, pero que juzga deben ser ahora escritas por él mismo. Tales son, entre otros artículos, los correspondientes a las voces entusiasmo, elocuencia, historia, oración fúnebre, uso...
El interés del texto de Marmontel trasciende el valor de un manual al uso y ello por varias razones: la primera, por la inclusión de voces interesantes como brillante. En estos casos, repara en términos con los que se califican las obras literarias o los autores, pero explica qué debe entenderse por tal cuando se habla de imaginación o cuando se habla de estilo. En otros casos, resulta relevante porque plantea qué debe entenderse o a qué debe aplicarse la noción de burlesco, término con el que finaliza este primer volumen.
La segunda causa del interés de estos textos, más allá de la recopilación misma, se encuentra en que incluye reflexiones y comentarios sobre las obras que cita, de modo que relaciona teoría y práctica y enseña al lector a analizar críticamente la literatura o, al menos, a enjuiciarla con un criterio profesionalizante. La tercera virtud de Marmontel se encuentra en que no siempre analiza la literatura como preceptista, sino también como escritor. Esta perspectiva aporta la visión propia de quien se acomoda a las reglas del arte, pero también la de quien las somete al tiempo y las adecua al público y la sociedad de su tiempo. Marmontel no fue un clasicista tradicional sino que deja entrever en sus comentario y juicios críticos la importancia de fundamentar también la creación poética y su recepción en estimación diacrónica de la poesía y en la importancia consiguiente de cuantas capacidades pertenecen al ámbito de la invención.
El texto fue muy reeditado en Francia, además de muy conocido y consultado en el resto de las naciones europeas occidentales.