El tomo II de esta obra se subdivide en dos partes correspondiendo cada una de ellas a las poéticas de Vida y Boileau con sus correspondientes comentarios. Concluye el volumen con un índice temático y onomástico.
En el «Prólogo» que precede al Arte poético de Vida presenta brevemente al autor y explica que la traducción es menos literal que la ofrecida de Aristóteles y Horacio en el volumen anterior. En relación a Boileau, defiende al autor de las críticas recibidas y lo valora por ofrecer un tratado muy completo y un poema didáctico. Añade que, en este caso, los comentarios proceden fundamentalmente de Corneille, a quien Battuex admira. En su opinión, Boileau forma parte por derecho del Parnaso de los legisladores.